jueves, 10 de mayo de 2007

Ya pasó el Día de las Madres

Odio el Día de las Madres. El tráfico es insoportable y deprime ver el mar de cabecitas blancas en los restaurantes, pues con sólo pensar que los otros 364 días del año están encerradas lavando, planchando, guisando y siendo insoportablemente abnegadas, uno quiere salir corriendo. Además, mi madre vive a cinco mil kilómetros de distancia y no puedo celebrarla como lo hace todo el mundo. Hoy le hablé por teléfono, pero para ella el Día de las Madres toca este domingo 13, según la costumbre estadunidense de festejar a las progenitoras el segundo domingo de mayo. Así que le volveré a hablar. Dios bendiga a Skype.

Felicito a todas las madres con las cuales me cruzo, incluyendo a la de mis hijos. Pero nosotros (mamá, papá, hijos) no tenemos la costumbre de salir a comer a restaurantes el 10 de mayo. La tradición familiar (hablo ahora de la familia que son los amigos) ha sido celebrarlo con Rubén Bonifaz Nuño, el poeta mayor de México y, probablemente, de lengua española. "¿Por qué me limitas?", preguntaría él, socarrón. Bueno: el mayor poeta de todos los idiomas y de todos los tiempos.

A Rubén lo hemos celebrado en 10 de mayo porque "ha sido como una madre para nosotros": Vicente Quirarte, Francisco Hernández, Raúl Renán, Bernardo Ruiz, Fausto Vega, René Avilés Fabila, Josefina Estrada, Marco Antonio Campos... El lugar más socorrido por esta Cofradía de Calacas (Bernardo Ruiz dixit) ha sido El Rioja, allá por Insurgentes Sur, antes de llegar a Ciudad Universitaria, del lado oriente. Es un lugar ruidoso pero como tiene mucha luz, le gusta a Rubén y allá los meseros lo tratan a cuerpo de rey, como él se merece. Nosotros les hacemos segunda.

Este año no hubo convocatoria, y eso me entristece. Se me vino encima el día 10 y ni cuenta me di. Por este medio cibernético hago un llamado a los Calacas a mover el día de las madres a cualquier otro, y que sea pronto, porque cabecitas blancas puede haber muchas, pero Rubén sólo hay uno.

El doctor Bonifaz nació el 12 de noviembre, Día del Cartero. Mi mamá llegó al mundo una semana antes, el día 5 del mismo mes y del mismo año: 1923. Dos cabecitas blancas en una sola semana.

Para aquellos que no creen que yo tenga madre, incluyo una fotografía por la banda que está a la derecha. Allí estamos bailando en una fiesta familiar en 2006. Como puede apreciarse, yo usaba lentes
todavía y había comido demasiado.

1 comentario:

Eduardo García Aguilar dijo...

Pues por aqui celebramos el dia de las madres también. Deben celebrar de todas maneras en el Rioja con Bonifaz Nuño... Que nostalgia de mis años de México cuando tenia menos de 30 y era feliz y documentado, eso sí. Veo que pasaré a la historia por la bella foto que te tomé. Excelente. hasta la vista Chao Eduardo